El otro día hablábamos del uso responsable de los servicios sanitarios, de no ir a urgencias corriendo al primer moco, de saber manejar en casa las enfermedades más banales...
Hoy toca hablar de corresponsabilidad con la gestión del sistema sanitario (público o privado, para todos vale).
Hoy, como casi cada día, algunos de los usuarios que están apuntados en mi agenda de trabajo diario, no han venido a visitarse. Han reservado un hueco de mi tiempo de atención y me he quedado esperando (eso nunca pasa, muchas veces lo vivimos como un alivio para recortar tiempo de espera...) pero bueno, a lo que íbamos, que se piden cita y luego no vienen. ¿Y entonces que?¿ahora que pasa? pues muy sencillo, NADA. Este mismo usuario volverá a citarse una vez más y si le va bien vendrá o no lo hará, sin ningún tipo de penalización. ¿Es esto sostenible?¿Influye en las listas de espera? Pues supongo que algo debe influir..., Hoy me he puesto a revisar las agendas de todos los profesionales de enfermería del centro en el que trabajo de los últimos 4 meses del pasado año y he contado un total de 426 citas programadas que no se han visitado (somos 7 enfermer@s), si me salto todo el trabajo de estadística que tocaría hacer para tener en cuenta factores epidemiológicos y mil historias, así a groso modo, con la cuenta de la vieja y una simple multiplicación me saldrían 1278 citas al año que no vienen (solo para 7 profesionales), una media de 182 visitas por profesional, casi nada, y eso que se trata de un centro de Atención Primaria, de esos que damos cita de un día para otro, no se trata de citas programadas con un año de antelación...
Quizás si todos fuéramos un poquito más responsables, todos nos beneficiaríamos de una mejor y más rápida atención. Que quede claro que no estoy a favor de los recortes en el sistema sanitario, que no me parece bien que en muchos sitios cada vez sean menos los que han de asumir más trabajo llegando a estar en saturación continua, pero muchas veces las cosas se saturan porqué no somos racionales ni en su uso ni en su gestión.
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